Después del verano, llega el momento de revisar las instalaciones de gas y calefacción para su correcto funcionamiento. Las instalaciones domésticas deben pasar por varios controles siendo uno de ellos la inspección periódica, de obligado cumplimiento cada 5 años. Además, una vez al año, en cada hogar, se debe realizar el mantenimiento de la caldera y las instalaciones de calefacción con una potencia superior a 70 kw. Unas revisiones que ayudarán al buen mantenimiento en el hogar y a mejorar la eficiencia energética de las instalaciones.
Entre los consejos más inmediatos, es fundamental comprobar que las rejillas de ventilación se encuentran en perfecto estado sin ningún tipo de obstrucción. Por otro lado, cualquier modificación en las instalaciones o en aparatos de gas, deben ser realizadas por empresas instaladoras y asegurarse de tener instalado un dispositivo que impida el funcionamiento simultáneo de la campana extractora y la caldera de gas no estanca, o calentador, en el caso de que ambas estén instaladas en el mismo recinto.
Los radiadores pueden necesitar una purga, sobre todo al comenzar cada temporada de otoño. Esta se realiza abriendo un poco la espita situada en la zona superior de cada radiador para sacar el aire (poner un vaso debajo para recoger el agua que caiga), procurando no sacar mucha agua para no bajar excesivamente la presión del circuito.
La calefacción es un circuito cerrado de agua, que debe estar a una presión de trabajo de aproximadamente 1,5 bares, aunque esto se modifica un poco según el modelo de caldera. Lea las instrucciones del fabricante para conocer la presión correcta y el método para añadir agua al circuito si la necesitase. Hay que recordar que la medición se debe hacer con la caldera fría controlando la presión a través de un mamómetro.
Cómo ahorrar en calefacción
El consumo de calefacción es el gasto energético más elevado de los hogares por lo que es importante tener en cuenta recomendaciones para ahorrar dinero y energía. Según el último estudio del Índice de Eficiencia en los Hogares elaborado por Gas Natural Fenosa, el potencial de ahorro en los hogares españoles en el uso de la calefacción es del 25,5 por ciento, lo que equivale a 1.190 millones de euros al año que se podrían ahorrar el conjunto de los hogares si aplicaran algunas medidas de ahorro en la calefacción.
- La temperatura ideal de calefacción es entre 19 ºC y 21 ºC. En las habitaciones que sólo se usen para dormir por la noche, una temperatura de 16 ºC a 18 ºC es suficiente. Por cada grado más de calefacción se aumenta el consumo energético de un 7 por ciento.
- Es imprescindible purgar los radiadores de la vivienda periódicamente, ya que el aire acumulado en los mismos dificulta la transmisión del calor del agua caliente al exterior.
- Cerrar las llaves de los radiadores de los cuartos que no se utilicen habitualmente manteniendo la puerta igualmente cerrada.
- En invierno, para airear la vivienda, es suficiente abrir las ventanas 10 minutos para ahorra energía.
- Es importante realizar un mantenimiento periódico de calderas y equipos de calefacción que revise las instalaciones y las mantenga en óptimo funcionamiento garantizando así su máxima eficiencia.