Las preferencias en el consumidor han cambiado mucho en los últimos años. Seguimos fijándonos en el diseño, el precio, las modas... pero sin duda otro de los factores que más se tienen en cuenta en los últimos tiempos es que sea respetuoso con el medioambiente. Cada vez son más los consumidores que buscan marcas comprometidas con el planeta.

¿Has oído hablar del eco-friendly?

La forma de comprar está cambiando como también lo hacen las preferencias de los consumidores. ¿Qué se busca ahora? Productos sostenibles que eviten dañar nuestro entorno, ya sea en cosmética, ropa, envases... Cada vez son más las opciones sostenibles que nos ofrece el mercado, y que ahora se conoce con el nombre eco-friendly.

¿Y qué es? Muy sencillo, son productos que por su composición, no contaminan. Este nuevo término va asociado al respeto por el medio ambiente y a una vida saludable. Surge a raíz del cambio climático y las consecuencias que este está teniendo en nuestro entorno, traducidas en desastres naturales, pérdida de biodiversidad, etc. Son cuestiones que -lejos de pasar desapercibidas en nuestra sociedad- han calado hondo.

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Por suerte para todos nosotros se trata de una moda sana y que parece que viene para quedarse, pues también ha tenido una gran acogida entre los millennials, que se ha sumado a la corriente, apostando por comercios que cumplen con estos valores.

Como ya hemos avanzado antes, las necesidades y preferencias están cambiando y las empresas se tienen que adaptar a las nuevas tendencias. Por eso, cada vez son más las tiendas de ropa que apuestan por tejidos sostenibles en la confección de las prendas, como es el caso del algodón orgánico o el hilo 100% reciclado. Otro ejemplo del buen hacer son aquellas marcas que directamente apuestan por la creación de productos a través de materiales reciclados. También hay otros negocios que apuestan por dar una segunda vida a las prendas usadas.

Pero no solo encontramos ejemplos en la ropa, también en la cosmética. La elaboración de cosmética natural y respetuosa con el medioambiente ha experimentado un repunte en los últimos años. Aumenta el número de marcas que utilizan en su elaboración materias primas ecológicas y eliminan los pesticidas y sustancias tóxicas.

Tenemos infinitos ejemplos, porque esta “moda” va en aumento.

¿Tiene algún beneficio para las empresas?

Por supuesto. Ya el hecho de crear conciencia en la sociedad sobre el impacto de nuestros actos en el entorno, es un beneficio por sí solo. Pero hay muchos más.

Una empresa sostenible genera reputación. Es un factor muy positivo que está bien visto socialmente y genera cercanía con la marca. Pero no solo repercute a nivel externo, ya que una empresa que cuenta con una política de sostenibilidad, hace que sus empleados se sientan más cómodos e identificados. Otra de las grandes ventajas es el ahorro de costes que produce el reciclaje, reducción de deshechos y el aprovechamiento de los recursos. Por último, es importante destacar que las empresas que se preocupan por el cuidado del medioambiente generan un impacto positivo en los clientes.

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