FACUA-Consumidores en Acción ha denunciado a Netflix ante la Dirección General de Consumo del Ministerio de Consumo y las autoridades de protección al consumidor de las diecisiete comunidades autónomas de España. El motivo: su subida 'unilateral' de las tarifas 'sin fundamentarla en motivos válidos contemplados en sus contratos con los usuarios'.
En octubre Netflix comenzó a comunicar a sus clientes que iba a realizar una modificación de los precios de sus planes Estándar y Premium. El estándar pasó de 11,99 a 12,99 euros y Premium pasó desde los 15,99 a los 17,99 euros. La compañía indicó a los clientes que esta subida se empezaría a aplicar a partir del siguiente ciclo de facturación.
Unos Términos de Uso abusivos para FACUA
FACUA basa su demanda en que hay una cláusula en los Términos de Uso de la compañía que la asociación considera abusiva. Esta dice que 'podemos cambiar nuestros planes de suscripción y su precio cuando lo consideremos oportuno', sin vincular estas modificaciones a ningún motivo válido recogido en sus contratos con los usuarios.
La asociación señala que esta cláusula de los Términos de Uso debe reconocerse como abusiva ya que la compañía pretende otorgarse la capacidad de modificar el contrato de forma unilateral, en cualquier momento y sin un motivo concreto.
Los errores de traducción en Netflix son un reflejo de las malas condiciones de sus profesionales y el abuso de la traducción automática
Si tenemos en cuenta la legislación española encontramos que el artículo 85 del Real Decreto Legislativo 1/2007, de 16 de noviembre, donde se recoge la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios y otras leyes complementarias, esta señala como abusivas 'las cláusulas que reserven a favor del empresario facultades de interpretación o modificación unilateral del contrato' a no ser que haya unos motivos válidos para ello.
Otra de las normas españolas citadas por FACUA es el artículo 1.091 del Código Civil que recoge que 'las obligaciones que nacen de los contratos tienen fuerza de ley entre las partes contratantes, y deben cumplirse al tenor de los mismos', mientras que el artículo 1.256 señala que 'la validez y el cumplimiento de los contratos no pueden dejarse al arbitrio de uno de los contratantes'.
El artículo 1.258 indica que los contratos 'obligan, no sólo al cumplimiento de lo pactado, sino también a todas las consecuencias que, según su naturaleza, sean conformes a la buena fe, al uso y a la ley'. Es decir, que Netflix estaría incumpliendo el contrato con cada cliente, al cambiar unas tarifas acordadas sin una expresa mejora del servicio.
Netflix asegura que su decisión es legal
Por su parte, Netflix ha hablado con Xataka y defiende que la subida de precios se ha realizado de manera completamente legal. Según el portavoz de la plataforma, la subida de precios viene acompañada con una mejora del catálogo de series y películas, así como de la calidad del servicio que proporciona su plataforma.
Otro de los argumentos del servicio de streaming es que 'dado que no existe ningún tipo de permanencia,** si el consumidor no está de acuerdo con este cambio puede cancelar la suscripción** en cualquier momento o cambiar de plan, ya que el Básico mantiene su coste de 7,99 euros al mes'.
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